Tranquilidad de la Mañana

Cuando el día despierta con su luz suave, los pájaros susurran secretos de antaño. El rocío acaricia las verdes hojas, y el mundo respira un aire nuevo. La brisa habla en voz calmada, y el rumor del río cuenta cuentos de paz. En un rincón del jardín, una flor recién nacida danza al ritmo del viento, abrazando el sol. Es en estos momentos, cuando uno escucha la serenidad del alma, el murmullo del corazón. Cada instante es eterno, lleno de belleza sencilla. Y en la soledad nos encontramos en la compañía de todo lo que late. La tranquilidad de la mañana nos envuelve, susurrando que el horizonte siempre está lleno de promesas por descubrir.